El convenio también posterga 2 años la opción de compra de aviones adicionales acordados previamente
La aerolínea de bajo costo estadounidense Spirit Airlines anunció un significativo aplazamiento en la recepción de aviones nuevos de Airbus, una medida acompañada por la decisión de otorgar licencias de descanso a 260 pilotos.
El convenio modificado con Airbus también posterga dos años la opción de compra de aviones adicionales acordados previamente, sin modificar el total de aeronaves ordenadas ni las opciones de compra futuras.
Este ajuste forma parte de una estrategia más amplia orientada a revitalizar la empresa y concentrar sus esfuerzos en su operación principal.
Confirmado el pasado 8 de abril de 2024, Spirit Airlines renegoció con Airbus la reprogramación de entregas de aviones inicialmente previstas para el segundo trimestre de 2025 hasta 2026. Ahora, estos aviones se programaron entre 2030 y 2031.
“No obstante, los aviones de arrendamiento directo que estaban programados para entregarse en el mismo intervalo, específicamente uno en el segundo y otro en el tercer trimestre de 2025, no están sujetos a este aplazamiento”, explicó un representante de Spirit Airlines.
La aerolínea indicó que este retraso en las entregas de Airbus reforzará su liquidez en aproximadamente 340 millones de dólares (mdd) en el transcurso de los próximos dos años, sin alteraciones en el calendario de entregas de aviones previsto para 2027 a 2029.
“Este ajuste en nuestro acuerdo con Airbus es un componente clave de nuestro plan exhaustivo destinado a mejorar la rentabilidad y fortalecer nuestra estructura financiera. Además nos ofrece la oportunidad de reorganizar la empresa y enfocarnos en nuestras operaciones principales, adaptándonos simultáneamente a las variaciones del mercado”, afirmó Ted Christie, presidente y director ejecutivo de Spirit.
Como parte de esta reestructuración, Spirit Airlines comenzará a otorgar licencias a 260 pilotos a partir del 1 de septiembre de 2024. La decisión responde a la inmovilización de parte de su flota debido a problemas de disponibilidad de los motores Pratt & Whitney GTF y al propio aplazamiento de las entregas.
“La decisión de otorgar licencias a los pilotos, aunque difícil, fue necesaria ante la inactividad de parte de nuestra flota y el reajuste de nuestras futuras entregas. Nos esforzamos por proteger a nuestro equipo mientras buscamos alcanzar un equilibrio financiero positivo y consolidarnos como una empresa robusta con un futuro prometedor”, expresó Christie.
Spirit Airlines espera un notable incremento en su liquidez gracias a una compensación estimada de entre 150 y 200 mdd por parte de Pratt & Whitney, relacionada con la revisión de sus motores GTF.
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