Cuesta 2,200 mdd a la industria el equipaje mal manejado: OAG

A medida que la industria de la aviación continúa su trayectoria hacia un futuro enriquecido con innovaciones tecnológicas, el impacto de estos avances se extiende más allá de los “aspectos minoristas” de los viajes aéreos de cara al cliente, como la experiencia de reserva de vuelos o el servicio al cliente, afirmó la consultora OAG.

Indicó que la industria también experimenta avances significativos en áreas operativas como las paradas de aeronaves y la planificación de vuelos. Estas innovaciones no sólo mejoran la eficiencia operativa sino que también allanan el camino para prácticas más sostenibles en el sector de la aviación.

La consultora explicó que otro componente vital del ecosistema de operaciones de aviación a menudo escapa a la atención pública, pero es igualmente crucial para el desempeño general de la industria: la gestión de equipaje es una operación compleja que exige precisión, eficiencia e innovación.

Airport Industry News destacó que el equipaje mal manejado, en particular los más de 4 millones de maletas mal manejadas durante las transferencias, le costó a la industria la alarmante cantidad de 2,200 millones de dólares (mdd) sólo en 2022.

Por lo que día a día se buscan avances que tienen como objetivo optimizar todo el ciclo de vida del equipaje, desde el check-in hasta la entrega final, reduciendo significativamente las posibilidades de mal manejo y mejorando la experiencia general del pasajero.

En el sistema actual de gestión de equipaje, a la llegada de un avión, el equipaje normalmente se descarga y se clasifica inmediatamente en equipaje local y de transferencia. 

Para algunos transportistas, el equipaje también se puede clasificar previamente y colocar en contenedores mediante dispositivos de carga unitaria (ULD) según si es local o de conexión. 

El equipaje local, a menos que sea necesario, pasar por la aduana, se transporta rápidamente al área de recepción. Mientras que el equipaje transferido se dirige a las instalaciones de clasificación para dirigirse a vuelos posteriores o, en los casos en que el tiempo es esencial, se inicia una transferencia directa "de cola a cola" al avión de conexión.

Más allá de los múltiples pasos que implican, las transferencias de extremo a extremo requieren notablemente mucha mano de obra. Este proceso requiere entregas individuales en puestos de aeronaves específicos, en contraste con el enfoque más sencillo de depositarlos en un punto de recepción de equipaje cercano.

A medida que más viajeros surcan los cielos, se intensifica el desafío de gestionar eficientemente un mayor volumen de equipaje, lo que pone de relieve la fragilidad del sistema, especialmente durante las temporadas altas.

Crecen cifras de equipaje mal manejado

En la gestión de equipaje, la industria aérea ha mejorado constantemente su eficiencia en el manejo, con una tasa de equipaje perdido que disminuyó al 0.6% de todas las maletas de los pasajeros entre 2016 y 2019. Esta tasa cayó aún más al 0.35% durante 2020, en gran parte debido a la drástica reducción del número de pasajeros, resultante de las restricciones de viaje globales y el impacto de la pandemia en los viajes aéreos.

Sin embargo, a medida que los viajes se recuperan, después de la pandemia, esta tendencia positiva se revirtió. Según el último informe Baggage IT Insights de SITA, la tasa de equipaje mal manejado aumentó de menos del 0.5% de todas las maletas de los pasajeros antes de la pandemia a casi el 0.8% en 2022.

Al desglosar estas cifras, se revela que el 80% de las maletas mal manejadas simplemente se retrasaron, mientras que el 20% restante se perdió o se dañó.

Es importante señalar que el desafío del manejo del equipaje se vuelve más agudo en el contexto de los vuelos de conexión, particularmente en los viajes internacionales. 

Los datos de SITA indican que las maletas de transferencia constituyeron la mayoría del equipaje mal manejado en 2022.

Se descubrió que la tasa de maletas mal manejadas en vuelos internacionales es ocho veces mayor en comparación con los vuelos nacionales.

Este es el caso, ya que el mal manejo durante el traslado es una de las razones principales por las que el equipaje puede retrasarse o perderse, y a menudo ocurre cuando los sistemas de manejo no tienen tiempo suficiente para transferir el equipaje entre vuelos. 

Por lo tanto, la probabilidad de un mal manejo aumenta cuanto más equipaje se transfiere, lo que hace que los viajes con múltiples paradas sean especialmente vulnerables a complicaciones con el equipaje. Además de causar una inmensa frustración a los pasajeros, el problema del equipaje mal manejado también representa una carga financiera significativa para la industria, pues tan solo en 2022, le costó la cantidad de 2,200 millones de dólares (mdd).

Raíz del mal manejo

El aumento de las tasas de equipaje perdido desde 2020 puede deberse a la escasez de mano de obra en los aeropuertos. Durante la pandemia, la industria de viajes enfrentó una recesión significativa que provocó el despido de miles de empleados. 

Posteriormente, a medida que se reanudaron los viajes, la industria tuvo dificultades para recontratar personal, lo que generó un déficit de mano de obra, particularmente en funciones de operaciones terrestres como la gestión de equipaje. 

Una encuesta de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) de 2023 encontró que el 60% de los supervisores de asistencia en tierra sentían que no tenían suficiente personal calificado para garantizar operaciones fluidas.

Esta escasez ha llevado a una reducción en la cantidad de maletas entregadas directamente de un avión a otro (transferencias de cola a cola), lo que ha resultado en un mayor número de maletas que no logran conectarse a sus vuelos previstos. Además, el resurgimiento de los viajes internacionales y la persistente congestión en los aeropuertos agravan el desafío.

Como señaló Aviation Pros, un problema importante en la gestión de equipaje es la ausencia de un intercambio completo de datos en tiempo real entre aerolíneas, aeropuertos y equipos de asistencia en tierra. 

Esta brecha entre el flujo de datos interconectados y las capacidades de seguimiento en tiempo real a menudo resulta en equipaje extraviado y retrasos. 

En este contexto, OAG asegura que desempeña un papel crucial al permitir la conectividad de datos. Al simplificar datos complejos e integrarse perfectamente en varios sistemas, proporciona una fuente de información consistente y confiable que ayuda a optimizar la gestión de equipaje entre las diferentes partes interesadas.

En respuesta al aumento de las tasas de equipaje extraviado, ha habido un esfuerzo concertado tanto por parte de los viajeros como de las aerolíneas para mejorar la gestión del equipaje a través de soluciones tecnológicas innovadoras.

El creciente interés por las soluciones de seguimiento automático es evidente en las tendencias de búsqueda online. Por ejemplo, las búsquedas en línea de “seguimiento de equipaje” han experimentado un aumento espectacular del 220% durante el año pasado, mientras que las búsquedas en Google relacionadas con equipaje se han más que cuadruplicado desde principios de 2022.

En el frente de aeropuertos y aerolíneas, también existe un claro reconocimiento de la necesidad de mejorar la tecnología en la gestión de equipaje. Según la encuesta Airport Business 2023 Baggage Handling System, el 75% de los aeropuertos de América del Norte planean actualizar sus sistemas de manejo de equipaje en los próximos cinco años.

Según una investigación de SITA, las actualizaciones del estado del equipaje en tiempo real también se están convirtiendo en una prioridad para las aerolíneas.

Actualmente, el 57% de las compañías aéreas ha equipado a su personal con acceso móvil a información sobre equipaje en tiempo real, una cifra que se espera que aumente al 84% para 2025.

Además, un importante 67% de las aerolíneas planea ampliar esta capacidad a los pasajeros, un salto considerable respecto al 25% actual.

Este último cambio hacia proporcionar a los pasajeros información sobre el estado del equipaje es particularmente crucial. Para ofrecer una experiencia óptima a los pasajeros, es esencial que las aerolíneas no sólo optimicen sus procesos internos sino que también compartan información relevante con los viajeros.

La creación de un panel de seguimiento de equipaje fácil de usar para los pasajeros cerraría la brecha entre las aerolíneas y sus clientes, mejorando la transparencia y la satisfacción.

Por lo tanto, la clave para optimizar completamente el viaje del equipaje radica no solo en el flujo fluido de datos en tiempo real entre aeropuertos, aerolíneas y servicios de asistencia en tierra, sino también en brindar a los pasajeros acceso a esta información.

El mercado mundial de software para el manejo de equipaje en aeropuertos, por ejemplo, está experimentando un crecimiento notable. Las proyecciones indican que el tamaño del mercado, valorado en 1,570 mdd en 2023, se expandirá a la impresionante cifra de 2,750 mdd en 2030. 

Esto representa una sólida tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de casi el 10%, lo que subraya el dinamismo y el crecimiento del sector. Esta previsión, respaldada por estudios de firmas como Mordor Intelligence, refleja la vigorosa expansión y el potencial del sector.

La clave para este proceso es la capacidad del software para integrarse perfectamente con varios sistemas de aerolíneas, desde la información del vuelo hasta la reserva y la salida.

Los sistemas de software avanzados también apuntan a equilibrar las transferencias de un extremo a otro, considerando la disponibilidad de recursos y la carga de trabajo. Los administradores de equipaje pueden definir ventanas de tiempo específicas para las horas límite, dentro de las cuales el software maximiza dinámicamente las conexiones de cola a cola. 

Paralelamente a la importancia de los sistemas de software en la gestión de los flujos de equipaje, se puede decir que la tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID) ha desempeñado el papel más importante en el contexto de la innovación en el manejo de equipaje en los aeropuertos en los últimos años. 

La RFID ofrece varias ventajas sobre los métodos tradicionales de escaneo de códigos de barras. Permite el seguimiento automático del equipaje durante todo el proceso de manipulación del mismo sin necesidad de escaneo directo en la línea de visión. 

Esto no sólo mejora la eficiencia del seguimiento del equipaje, sino que también reduce significativamente las posibilidades de que se produzca un mal manejo del mismo. 

Sin embargo, la RFID resulta no ser la solución integral para el seguimiento del equipaje y se enfrenta a una serie de desafíos. Los altos costos de implementación, la falta de interoperabilidad estandarizada entre diferentes aeropuertos y aerolíneas y la cobertura limitada en algunas áreas obstaculizan su efectividad.

Dado que aún no existe la solución tecnológica perfecta, los aeropuertos y las aerolíneas están participando activamente en programas internos de innovación, experimentando con las últimas soluciones de gestión de equipaje. 

Estas iniciativas no son simples pruebas, sino esfuerzos concertados para revolucionar la forma en que se maneja, rastrea y gestiona el equipaje, reduciendo significativamente el número de incidentes de mal manejo y retrasos.

El futuro de la gestión del equipaje

A medida que la industria de la aviación continúa evolucionando, el papel de los datos y la tecnología para mejorar la gestión del equipaje se vuelve cada vez más fundamental. Las innovaciones representan un cambio significativo hacia sistemas de manejo de equipaje más inteligentes, más eficientes y centrados en el cliente.

El desafío a menudo radica en superar los sistemas tradicionales, que pueden resultar restrictivos debido a su naturaleza anticuada. El futuro está en las soluciones basadas en la nube capaces de integrar y analizar datos relevantes a lo largo de todo el viaje del equipaje. 

Este enfoque no solo mejora el seguimiento de maletas, también representa una tendencia más amplia de la industria: reinventar la infraestructura de datos para respaldar tecnologías innovadoras y prácticas emergentes.

Aceptar esta evolución implica no sólo la adopción de cintas transportadoras y RFID más avanzadas, sino también un compromiso con el intercambio y la democratización de los datos de las aerolíneas. 

Este cambio hacia sistemas de datos abiertos e interconectados beneficiará a todo el ecosistema de la aviación. Allana el camino para mayores esfuerzos de colaboración, fomentando mejoras en toda la industria en materia de eficiencia, sostenibilidad y experiencia de los pasajeros.