La Alianza para la aviación planteó los desafíos que deberán superarse
La Organización Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea (Eurocontrol) llevó a cabo la primera asamblea general de la Alianza para la aviación de cero emisiones (Alliance for Zero-Emission Aviation o AZEA) y tuvo el objetivo de preparar el ecosistema aeronáutico para la entrada en servicio de los aviones de hidrógeno y eléctricos.
Esta iniciativa voluntaria a la que Eurocontrol se unió a principios de este año, encabezada por la Dirección General para la Industria de la Defensa y el Espacio (DEFIS) de la Comisión Europea, reunió a representantes de la aviación para responder a los desafíos que deberán superarse para una adopción exitosa de hidrógeno y tecnologías de vuelo eléctrico en la región.
El organismo se comprometió a otorgar sus datos únicos de tráfico aéreo y su capacidad de modelado de última generación, para respaldar la integración de aviones de cero emisiones en la red europea.
Esto incluirá pronósticos para respaldar la definición de escenarios de despliegue, que ayuden a identificar incentivos operativos y financieros para vuelos operados por dichas aeronaves, así como evaluar los requisitos de combustible y las necesidades de energía verde a nivel de red.
“Junto con socios públicos y privados, Eurocontrol está apoyando la preparación del ecosistema de descarbonización de la aviación para aeronaves con tecnología de cero emisiones. Nuestro objetivo es ayudar a la Alianza a tomar decisiones informadas para que podamos abordar mejor los desafíos que se avecinan, mientras buscamos integrar estos aviones de nueva tecnología en la red de tráfico aéreo europeo del futuro”, aseveró Eamonn Brennan, director general de la autoridad aérea.
Agregó que los ingenieros están más cerca que nunca de lograr el objetivo del vuelo con cero emisiones, y el creciente número de empresas emergentes en este ámbito es testigo del dinamismo de la industria aeronáutica.
“Este proceso solo funcionará si todo el ecosistema industrial está involucrado: aquí es donde entra en juego la Alianza. Ayudará a abordar todas las condiciones propicias para el despegue de los aviones con cero emisiones: innovación, inversión, infraestructura, regulación”, añadió.
Agregó que mientras la Alianza busca preparar el mercado para la entrada en servicio de aviones de cero emisiones, las prioridades de trabajo se centrarán en los requisitos de combustible e infraestructura de los aviones de hidrógeno y eléctricos en los aeropuertos, en la estandarización y certificación y en las implicaciones para los operadores (aerolíneas) y la gestión del tráfico aéreo, además de proponer soluciones prácticas para superarlos.
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